¿Quién soy?... UN ENAMORADO DE SU PASIÓN, QUE SIN DARSE CUENTA, SE CONVIRTIÓ EN SU PROFESIÓN.
Siempre fui un apasionado de la belleza y un observador de todo lo que sucede a mi alrededor: el mar, el cine, la astrología, la moda, el amor… Con 18 años descubrí la fotografía y decidí que no podía ser solo una vocación, así que comencé con mis estudios de Imagen y Sonido. Dos años después, ya ponía en marcha Aldebarán Estudio.
Ya han pasado muchos años desde entonces; unos 25… y me siento afortunado de estar cada vez más enamorado de mi profesión:
"Me dedico a captar lo que los demás miran y no ven"
Desde entonces, uno no deja de formarse. Pero ¿cuál es la mejor formación? Creo que todos lo sabemos: la experiencia. Y lo que la experiencia me ha enseñado, todos estos años, es que una boda es el broche a una historia de amor increíble, donde tienes la responsabilidad de dejar memoria de todo lo que sucede. Sin distracciones, poses ni artificios, sino de una manera discreta, elegante, divertida y sutil; reflejando todo lo vivido sin que los novios ni sus invitados reparen en que estamos ahí.
Mi compromiso es ponerme en la piel de los novios y estar ahí para recoger cada momento, incluso aquellos que ni recordabais. Cuanto más tiempo pasa, más importante son las imágenes que recogemos. Y para que el resultado sea impecable, es muy importante saber qué queréis y qué esperáis de mi trabajo. Me tendréis a vuestra disposición para asesoraros en todo lo que necesitéis.
Tengo la suerte de haber vivido una boda desde dentro y mil desde fuera, por lo que sé ponerme en vuestro lugar y vivir el momento con la sensibilidad que requiere cada instante.